Después de la moda y todo lo relacionado con la belleza, mi tercera cosa preferida es la cocina. Me gusta cocinar y comer a partes iguales, aunque eso no significa que cocine bien. En realidad, creo que he tenido más errores que aciertos, sobre todo en lo que se refiere a postres y masas, soy un auténtico desastre. Por eso, para ahorrar tiempo y futuras complicaciones médicas, esta receta viene con truco..

Ingredientes: Masa para pizza, Tomate frito, Orégano, Mozzarella rallada, 1 Calabacín, 2 Tomates, Aceitunas negras (sin hueso)

Empezamos precalentando el horno a 200º grados o lo que indique el envase de la masa. Después, pelamos los calabacines y los cortamos en rodajas finas. Si las rodajas son muy finas, no hace falta que lo peléis, basta con lavarlo. Cortamos también el tomate en rodajas finas, y al igual que con el calabacín, si veis que tiene la piel muy dura lo podéis pelar. Apartamos y vertimos el tomate frito en la masa, espolvoreamos el orégano al gusto. Añadimos un poco de mozzarella y encima colocamos primero los calabacines y luego los tomates. Cuando hayamos acabado, esparcimos las aceitunas cortadas por la mitad por toda la pizza y si os apetece, podéis añadir más mozzarella.

La dejamos en el horno unos veinte minutos o hasta que la masa se empiece a dorar. Cést fini! Una pizza 100% vegetariana, super rica y muy sana. Por fin puedes repetir sin sentirte culpable..