Soy 100% defensora de los remedios naturales para casi todo. Que si aguacate para hidratar el pelo, tomates y sal para eliminar los puntos negros.. La naturaleza realmente nos ofrece de todo para casi todo.
Por eso, buscando en internet algún remedio para las rojeces, encontré que la miel no solo es buena para ello, sino que también es bactericida e hidratante – thank you bees. El azúcar, por otro lado, también es hidratante, y además contiene ácido glicólico, que ayuda al rejuvenecimiento de las células.
Para hacer este exfoliante no necesitáis más que dos cucharadas de azúcar y una de miel. Si tenéis la piel sensible, podéis usar azúcar moreno que es más fino. Si no tenéis azúcar moreno, simplemente añadid más miel que azúcar.
Yo me lo aplico sobre la piel húmeda y en movimientos circulares, insistiendo un poco más en algunas zonas (nariz, barbilla). A veces también lo uso en el cuerpo y las manos, y para que además de exfoliar me hidrate la piel suelo añadir un poco de aceite, que puede ser de coco, almendras..
Suelo usar este exfoliante una vez a la semana en la cara. En el cuerpo… es otra historia. Por cierto, aprovecho esta entrada para decir que las abejas se están extinguiendo y no podemos vivir sin ellas. Los Mayas..
buen consejo carlota! p.d: lo del tomate nunka falla jaja